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Capadocia: una experiencia única

Hay lugares que resultan muy difíciles de describir sólo con palabras: sencillamente hay que vivirlos, y hacerlo en primera persona, para entender hasta dónde llega su magia y su capacidad de dejarnos huella para siempre.

La Capadocia, región del centro de Turquía famosa en el mundo entero por sus características “chimeneas de hadas”, es uno de ellos. Un destino especial como pocos, plagado de historia y de historias, y siempre dispuesto a sorprender al visitante a cada uno de sus pasos.

El singular paisaje de la Capadocia, único en el mundo entero, es el resultado de millones de años de acción pausada, pero constante, de las fuerzas de la naturaleza. El aire y el agua han ido erosionado poco a poco un material geológico muy especial, la toba calcárea, al que han conferido las caprichosas formas que ahora configuran un paisaje –que muchos asemejan a un lugar tan remoto como la Luna– que visitan miles de personas de todo el mundo cada año.

Lo cierto es que, aunque no sea de origen lunar, la toba calcárea, también denominada travertino o piedra tosca, no es una roca cualquiera, sino que cuenta con características que la hacen única. Entre otras cosas, se trata de un material calizo muy poroso, ideal para albergar viviendas de esa característica e inconfundible forma triangular que inunda las postales de la Capadocia, y cuya visita sirve para imaginar cómo era la vida hace miles de años. También, para en- tender cómo sigue siendo a día de hoy para sus habitantes. Porque si por algo destaca la Capadocia es por estar, aún hoy, rebosante de vida. Algo más de un millón de personas siguen viviendo a día de hoy en un territorio formado por toda una serie de núcleos de población diseminados y con diferentes denominaciones, pero que sin embargo parece conformar una enorme ciudad. Un paraje en el que el entorno y lo urbano se funden en una única realidad.

Este territorio de la siempre recomendable Turquía fue, ya desde el origen de los tiempos, un paraje muy cotizado. Desde los tiempos del neolítico, el ser humano encontró en estas tierras un refugio perfecto en el que asentarse y tratar de prosperar. De hecho, en la ciudad de Çatal- höyük, considerada el primer asentamiento del lugar, se halló un fresco mural que data del año 6200 a. C, y que ya mostraba cómo se vivía por aquel entonces en este indómito rincón de la tierra. Hoy, este antiguo núcleo urbano sigue siendo el más grande y mejor preservado de la época neolítica en el Oriente Próximo. Para muchos historiadores es, de hecho, la primera aldea del mundo. Todo empieza aquí.

Puesto ambulante
La foto perfecta

La singular geografía de la Capadocia se aprecia en todo su esplendor en regiones como Göreme, denominación por la que se conoce a toda una serie de valles que conforman el parque Nacional del mismo nombre, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1985. Su Museo al aire libre constituye, quizá, la visita más popular de toda la Capadocia, y puede presumir de ser uno de los lugares más fotografiados de toda Turquía. Basta con conocerlo para entender el porqué.

Los primeros moradores de Göreme llegaron al lugar entre los siglos III y IV, cuando los cristianos del período romano fundaron allí varios monasterios. Pero a diferencia de los que se pueden admirar en cualquier otro punto geográfico del planeta, estos edificios religiosos fueron, también, excavados en la roca. El resultado no deja indiferente a nadie, e incluye no sólo lugares de culto sino también pensiones o pequeños hoteles, en los que vivir en primera persona una comunión única con la naturaleza del lugar.

Si lo que se quiere es obtener una panorámica global de Göreme, nada como realizar la ruta de senderismo que discurre a través del conocido como Pigeon Valley. La ruta, que se prolonga a lo largo de unos 15 kilómetros, apenas tiene un desnivel de 400 metros, lo que la convierte en ideal para ser recorrida en familia. La recompensa llega al final, con la coronación de uno de los miradores más visitados de toda la región. Un lugar desde el que se puede sacar algo parecido a la foto perfecta.

Oferta de Capadocia
En lo alto…
y en las profundidades

Más allá del mirador de Pigeon Valley, para tomar consciencia de la verdadera belleza de un paraje como Göreme, al igual que sucede en toda la Capadocia, hay un vehículo especialmente apropiado: el globo. Empresas como Voyager Balloons permiten al visitante sobrevolar toda la zona, en lo que resul- ta una experiencia verdaderamente sobrecogedora. La región de la Capadocia cuenta con una extensión aproximada de unos 50 kilómetros de diámetro, que inclu- yen partes de las provincias de Kayseri, Ak- saray, Niğde y Nevşehir. Un tamaño perfecto para disfrutar a vista de pájaro. Pero la Capadocia esconde infinidad de secretos, y algunos de ellos no son visibles ni siquiera desde las alturas: hay que bajar, literalmente, a las profundidades. Las ciudades subterráneas abandonadas constituyen otro de los mayores tesoros de la región. Aunque existen varias altamente recomendables, como las de Derinkuyu, Mazi y Öz- konak, pocas resultan tan espectaculares como la de Kaymakli, que también for- ma parte del Parque Nacional de Göreme.

Construida entre los siglos V y X y ocupada por diversas culturas a través de los siglos, Kaymakli fue diseñada para albergar a una población de hasta 600 personas, de cara a que pu- dieran aguantar en su interior durante unos seis meses en caso de invasión. Con una sola entrada y una laberíntica red de túneles que se extiende a lo largo de dos kilómetros y medio, la ciudad cuenta con áreas destinadas a todo lo imaginable: almacenes de alimentos, establos, cisternas, cavas, cocinas, iglesias e incluso sepulturas. Una auténtico hormiguero a escala humana que muestra, como pocos lugares del mundo, hasta dónde llega la ingeniería y su capacidad de adaptación al medio. De he- cho, aún existen zonas por descubrir dentro de esta ciudad subterránea, como el túnel que la une con la vecina ciudad de Derinkuyu, situada 9 kilómetros al sur, y que aún no ha sido completamente liberado. Algunas maravillas están condenadas a permanecer ocultas a los ojos modernos.

Comer, beber y descansar

La Capadocia no es sólo cultura e historia: también gastronomía. Y en ese sentido, la zona cuenta con una oferta homologable a los mejores destinos turísticos del globo. Cuando aprieta el hambre, la cocina turca despliega sus encantos ante el amante del buen comer.

La localidad de Ürgüp, de unos 35.000 habitantes, cuenta con varios de los establecimientos más recomendables de toda la Capadocia. Entre los que brillan con luz propia, Ziggy Cafe & Shoppe es siempre un acierto seguro. Una sabrosa mezcla de la cocina turca y mediterránea para satisfacer a los paladares más exquisitos, en un ambiente acogedor, familiar y festivo en el que destaca su eficaz y rápido servicio. Entre sus platos estrella, el pastrami o las brochetas de pollo, todo ello maridado con un vino que, en el caso concreto del blanco, destaca como uno de los alicientes para una vela- da inolvidable. ¿Una re- comendación? El menú Turco Meze, una degustación de tapeo local conformado por quesos, vinagretas, frutas, vegetales, carnes, purés, ensaladas o panes frescos.

Si se quiere disfrutar de un café, un té o una infusión después de una opípara comida, es muy recomendable dedicar un rato a saborear las exquisitas opciones que en este as- pecto ofrece el Sunset Café, ubicado en Valle de Kizilcukur, el conocido por los autóctonos como “el valle rojo”. Un paraje surrealista, como toda la Capadocia, que merece la pena sentarse a degustar con calma junto a una buena taza de café.

¿Y para dormir? Nada como dejarse caer por el hotel Yunak Evleri, también ubicado en el municipio de Ürgüp. Porque no hablamos de un hotel al uso, sino de un establecimiento construido, como no podía ser de otra manera tratándose de la Capadocia, en el interior de una cueva. El Yunak Evleri se sitúa en el acantilado de una montaña, rodeado por las inconfundibles “chimeneas de hadas”. El lugar cuenta con toda una serie de habitaciones que datan del siglo V e incluso una mansión de origen griego del siglo XIX. Un viaje en el tiempo que, como todo lo que rodea a la región turca de la Capadocia, es también un viaje a otro mundo.

Más información en: www.goturkiye.com