Desde junio 2015, el río Paiva, situado en el Geoparque Mundial Arouca de la UNESCO al norte de Portugal, ha dejado de ser misterioso y distante solo al alcance de aquello que se aventuran en aguas salvajes.
Los “Passadiços do Paiva” se van desplegando por el paisaje y nos acercan a los márgenes del río, a su fauna y flora únicas, a las paredes verticales… Son ocho kilómetros de una pasarela de madera, ubicada en la orilla izquierda del río Paiva, que llevan al visitante a un viaje en el que descubrir el rico patrimonio natural, geológico y cultural.
Se puede acceder desde dos puntos: los pueblos de Areinho y Espiunca. Las entradas están ubicadas al lado de sendas áreas de ocio y la ruta cruz zonas únicas. Recorre recuerdos de otros tiempos, formas de vida al borde del río, barqueros, molineros e incluso nos acerca a un antiguo castillo. Durante el recorrido de esta infraestructura incluida en la Red Natura 2000 el visitante descubrirá la gran riqueza de hábitats.
Como parte del Geoparque Mundial de la UNESCO Arouca, también es posible visitar los cinco Geosites “Passadiços do Paiva”, es decir, lugares de relevancia geológica: la “Garganta do Paiva”, la “Cascada das Aguieiras”, la playa fluvial Vau, la “Gola do Salto” y la “Falha da Espiunca”.
Otro de los elementos icónicos de los “Passadiços do Paiva” es una escalera monumental que serpentea por los escarpes de la garganta del río. Son alrededor de 1.000 escalones que no decepcionarán al visitante ya que tras ser recorridos, en lo alto de la pared, el esfuerzo se verá recompensado con unas vistas que cortan la respiración donde son protagonistas en el fondo del cañón las aguas de un azul cristalino del Paiva.
A medio camino, junto a la playa fluvial de Vau, el visitante encontrará un pequeño puente colgante de unos 43 metros largo y a unos 10 metros sobre el nivel del agua. Al atravesarlo, le permite observar, verticalmente, los fondos del río y la vegetación de galería junto al río.
En un futuro, en las cercanías de Passadiços, frente a la cascada de Aguieiras, habrá otro puente colgante. Actualmente en construcción, tendrá 516 metros de longitud, será el puente peatonal suspendido más grande del mundo y otra razón para visitar esta región.
Los “Passadiços do Paiva” están abiertos durante todo el año y en cada temporada las propuestas para descubrir esta infraestructura son diferentes. Si en verano es posible alternar la caminata con momentos de pausa para tomar el sol y recargar las baterías en las playas fluviales a lo largo de la ruta, en invierno se puede disfrutar de las aguas del Paiva e incluso aventurarse en un descenso en balsa antes o después de recorrer las pasarelas. En primavera se puede admirar el surgir de la naturaleza descubriendo las flores que nacen a lo largo de la ruta y deleitarnos con el canto de los pájaros que hacen de este lugar, su hogar. En otoño, el placer de caminar se ve reforzado por los colores de las hojas de los árboles que caen tapizando el sendero.
Sobre el funcionamiento de las pasarelas
La misión principal de los “Passadiços do Paiva” es crear conciencia sobre el patrimonio natural que los rodea, con miras, sobre todo, a la preservación ya que solo conservamos lo que conocemos. Por lo tanto, para promover la preservación del espacio y la calidad de la visita, existe un límite diario máximo de entradas. Recomendamos que reserve su visita con antelación en el sitio web http://www.passadicosdopaiva.pt, donde también puede consultar toda la información actualizada sobre esta infraestructura.
Más información:
Tienda interactiva Arouca Geopark
Calle Abel Botelho, nº4
4540-114 Arouca
256 940 258 I turismo@aroucageopark.pt
Reservas: http://www.passadicosdopaiva.pt