Los Caminos Naturales del centro de nuestra península nos invitan a conocer la extensa e increíble diversidad de sus paisajes: humedales, bosques, salares, cañones… a través de rutas recuperadas que rezuman la huella rural de sus habitantes. Recorrer estos caminos lentamente, saboreando la ruta, respirándola, en definitiva, dejándonos impregnar de sus muchos valores.
CAMINO NATURAL DE LOS HUMEDALES DE LA MANCHA
Todos recordamos esa escena de “Memorias de África” con la maravillosa música de fondo y la bandada de flamencos rosa alzando el vuelo reflejados en las lagunas de Kenia. En los Humedales de La Mancha podemos revivir lo más parecido a la sensación que nos provocaron esas escenas y este Camino Natural nos mostrará esa y muchas otras maravillas. Todo el conjunto lagunar fue declarado Reserva de la Biosfera en 1980 y entre otras zonas protegidas se encuentra el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel y el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera; además de Reservas Naturales, zonas ZEPA que forman parte de la Red Natura 2000.
Este Camino Natural se compone de 5 etapas y 6 ramales que discurren por la unión de las provincias de Toledo, Ciudad Real y Cuenca completando cerca de 150 kilómetros. Es un recorrido prácticamente llano que nos muestra una España poco visitada y cuyo paisaje cambia drásticamente con las estaciones: árido en verano y en las épocas más secas y rebosante de agua y vida con las lluvias del otoño y la primavera. Además reviviremos los andares del Quijote recordando su lucha contra los gigantes al divisar los molinos de Campo de Criptana.
Muchas de las lagunas que encontramos son de tipo endorreico hipersalino (que propician el desarrollo de enormes cantidades de alimento para la fauna) otras son depósitos aluviales de los ríos cercanos, otras se nutren de los acuíferos con aguas tan cristalinas que parecen desaparecer a nuestra vista y que propician el desarrollo de praderas subacuáticas y otras exclusivamente de las escorrentías en épocas de lluvia. Todo esto hace que el paisaje que veamos en una ocasión haya cambiado por completo la siguiente vez que vayamos: desde salares y extensiones secas que nos puedan recordar a paisajes más propios del Serengueti a extensiones inundadas y poco profundas que albergan una variedad infinita de aves que paran aquí en sus rutas migratorias. Esta variedad de espacios acuáticos contribuyen a una excepcional diversidad faunística característica de esta zona como especies de limícolas, anátidas, ardeidas, aguiluchos, etc., dependiendo del humedal que se visite.

CAMINO NATURAL DEL SANTANDER MEDITERRÁNEO (TRAMO SORIANO)
Si el anterior Camino Natural emulaba las llanuras kenianas, éste las regiones de los grandes bosques de Rusia. Tanto es así que estos paisajes sorianos se utilizaron para rodar varias escenas de la película Doctor Zhivago. Este tramo parte de San Leonardo de Yagüe, desde donde se puede acceder al Parque Natural del Cañón del Río Lobos, un espectacular cañón horadado por el río en la piedra caliza y sobrevolado por los majestuosos buitres leonados.
El camino conserva una pequeña parte de su trazado ferroviario original como recuerdo a alguna de las escenas de la súper producción cinematográfica. Las enormes extensiones de pino silvestre que nos rodean en estos inicios nos devuelven a nuestro tamaño real: pequeños en comparación con la grandiosidad de la naturaleza y el olor de la pureza del aire nos llena los pulmones. Esta sensación nos invitará a descubrir este bello camino cruzando puentes y dejando atrás las antiguas estaciones y apeaderos, como la de Pinar Grande, hoy en ruinas y que no refleja la importancia que tuvo en el pasado. El inmenso pinar da paso a una zona de verdes pastos donde se alimentan apaciblemente las vacas que nos miran pasar. A nuestro paso surge, imponente, en plena llanura, la gran ermita de La Blanca, construida en el siglo XVIII y donde cada tercer sábado de julio tiene lugar su conocida romería que congrega a los vecinos de los Pueblos de la Concordia.
Dejando atrás la localidad de Abejar nos adentramos en un paisaje de dehesas de roble melojo, una de esas intervenciones ancestrales del hombre en la naturaleza y que hoy llamaríamos “sostenible” que deja crecer buenos pastos para el ganado, en su mayoría vacuno. Siempre vigilados por la Sierra de Cabrejas, incluida en la Red Natura 2000, por sus sabinares, el paisaje se humaniza merced a cultivos de cereal en pequeñas parcelas bordeadas de zarzamoras, jaras, fresnos que dan cobijo a gran cantidad de aves cantoras. Este Camino Natural nos ofrece un recorrido muy variado en términos paisajísticos y antes de llegar a Soria, bordearemos el cauce del río Golmayo, pudiendo disfrutar de su característica vegetación de ribera.

CAMINO NATURAL DE LA CAÑADA REAL SORIANA OCCIDENTAL
Las 8 etapas de este Camino Natural recorren la vía pecuaria a su paso por Segovia, bordeando el Parque Natural Sierra Norte de Guadarrama que se extiende entre las provincias de Madrid y Segovia abarcando 19 municipios en la vertiente segoviana. Con este marco de enorme valor natural y paisajístico, el Camino Natural de la Cañada Real Soriana Occidental, es una de las rutas del centro de la península más bellas e interesantes. Recoge casi en su totalidad el trazado de esta importante vía de la trashumancia. La ruta comienza a 1.200 metros de altitud y llanea por la ladera atravesando zonas despejadas, de pastizales, vigilados por las cumbres de la sierra. Pasada la mitad del recorrido, el camino se hace algo más duro y se adentra en la zona más boscosa del recorrido donde descubriremos sabinares, pinares de pino silvestre y robledales de roble melojo (o rebollo).
Entre las poblaciones por las que pasamos, destaca la de Riaza situada a las faldas de la Sierra de Ayllón y que pasó en sus comienzos de ser un pueblo de herreros a procesar la lana de los merinos, debido a la importancia de las rutas trashumantes confiriendo gran importancia a esta población que hoy conserva toda su belleza y sabor rural.
PARA MÁS INFORMACIÓN: https://www.mapa.gob.es/es/desarrollo-rural/temas/caminos-naturales/